HERALDICA
Indice  
  Introducción
  El Escudo
  => Formas
  => Partes y Puntos
  Particiones
  Los Esmaltes
  Piezas
  Figuras
  Leyes de la heraldica
  Ornamentos Externos
  Elementos Guerreros
  Vocabulario
  Blasonamiento
  Escudos Autonomicos
  Cuarteles
  Lineas de division
  Mapa de esta web
  Contacto
Noemi de Orella
El Escudo
HISTORIA

Los orígenes del escudo se basan en la antigua arma defensiva que los guerreros embrazaban para resguardarse de los golpes de lanza y otras armas de sus enemigos. Los hombres de guerra acostumbraban a pintar en la parte externa de sus escudos figuras y jeroglíficos.
Se han encontrado símbolos, figuras y dibujos parecidos a los de la Heráldica en algunos monumentos asirios, caldeos y egipcios, lo que ha llevado a decir que la ciencia heráldica nació en Oriente, aunque la fecha no puede fijarse con exactitud. Representaciones simbólicas las hubo tanto en Roma, como en Grecia, segun reflejan los escritos de los historiadores Heredoto, Virgilio y Tácito. El primero ya habla de la costumbre de pintar ciertos dibujos en los escudos que servían de protección en el combate. En Grecia, Esquilo cuenta que los tebanos podían distinguir perfectamente a los siete jefes del ejército que sitiaba su ciudad a través de las divisas emblemáticas pintadas en sus escudos.

A través del tiempo, el escudo dejó de ser una defensa destinada a resguardar al guerrero de los golpes de su enemigo, para transformarse en señal de honor y nobleza, cuyo campo sirviera para el ejercicio del arte heráldico, colocando en él los atributos de las familias según las reglas del Blasón.

La verdadera difusión de las armerías debe fijarse en la Edad Media. Fue entonces cuando, con las guerras y las conquistas de tierras, estas se entregaron a deteminado noble por su soberano a título vitalicio y, por regla general, añadía el nombre de las citadas tierras al suyo propio.
Al convertirse los feudos en hereditarios, nacieron los linajes y esto llevó a la aparición de las armerías, su representación jeroglífica.

A este respecto, el más antiguo monumento que se conoce en Europa en el que aparecen figuras con armerías, según señala Alejandro de Armengol en su obra "Heráldica", es el de Raúl de Beaumont (1.087, 1.110) y, de acuerdo a lo que también indica el autor antes citado, en la tumba de Geoffroy Plantagenet, Conde de Abnjou, el está representado por un largo escudo que va cargado con ocho leones rampantes. En España las divisas heráldicas no comenzaron a generalizarse en las casas nobles hasta el siglo XII.

Son varias las interpretaciones que pueden darse a la aparición del Blasón. En la época del feudalismo y la caballería, los grandes señores querian distinguirse unos de otros al tiempo que hacían reflejar en sus escudos los signos de sus hazañas y los honores otorgados por su rey. Hay que tener en cuenta que conforme la época avanzaba más numerosos eran los ducados, marquesados, condados, baronías, etc. y cada noble se sintió obligado a establecer un símbolo que definiera sus posesiones y representara su autoridad sobre las mismas. Fue la época de las justas y los torneos; los caballeros al llevar sus rostros ocultos por el yelmo eran irreconocibles por lo que en su deseo de hacerse conocer, de que los espectadores supieran sin la menor duda de quien se trataba, recurrieron a ostentar distintos colores en sus cimeras y pintar, bien visibles, sus blasones en sus escudos, así como en las gualdrapas de sus caballos.

Su forma puede ser muy variada. El escudo español es cuadrilongo, redondeado por lo bajo unas veces, y otras en sus dos ángulos inferiores y terminando en punta en medio de la base. Aunque hoy en Francia se utiliza el mismo escudo, en tiempos fue todo cuadrado o en triángulo curvilíneo. El alemán suele ser con escotadura al lado diestro, la que servía en la antiguedad para afianzar y sujetar la lanza. También lo usan en otras formas. Los ingleses suelen aceptar los escudos francés y español aunque modificándolo para ensanchar la parte superior del mismo. Por su parte los italianos utilizan el escudo en forma de círculo y de óvalo. Los eclesiásticos son asimismo ovalados y rebordeados para denotar el orden sacro. Cuando se trata de un doble escudo, es decir, de los casados cuyas armas son distintas a las de la esposa, se utilizan dos escudos, poniendo las armas de la esposa a la siniestra y las del esposo a la diestra.

En la siguiente pagina, en el apartado de "formas" podemos ver ejemplos de los diferentes tipos de escudo.
Citas  
  “Lo pasado es, de algún modo, necesario, ya que es imposible la no existencia de lo que ha sucedido” – Vico.

“La Heráldica es testimonio de nuestra Historia” – Pierre Deveaux

"El pasado tiene sus códigos y costumbres" - Sócrates

"No hace falta renunciar al pasado al entrar en el porvenir. Al cambiar las cosas no es necesario perderlas." - John Cage

"No perdamos nada del pasado. sólo con el pasado se forma el porvenir." - Anatole France

"El que se vanagloria de su linaje, alaba lo ajeno." - Séneca
 
Autora  
  Noemi de Orella Fernandez

Titulada en Protocolo y RR.II.
 
Noemi de Orella Este sitio web fue creado de forma gratuita con PaginaWebGratis.es. ¿Quieres también tu sitio web propio?
Registrarse gratis